jueves, 20 de septiembre de 2007

Se corrompió la sal: ahora quién podrá defendernos?



Apestan los contralores de Bogotá y Cundinamarca, elegidos para vigilar el uso legal, decente y eficiente de los recursos públicos pero hoy están cuestionados por la justicia penal.
El gobernador de Cundinamarca, Pablo Ardila, aparece implicado en el escándalo del Contralor, Juan CArlos Medina Ovalle, quien quedó detenido por orden de un fiscal que lo investiga por supuesto soborno en un contrato para el mantenimiento del parque automotor del departamento.
Los dos, ya habían aparecido como compinches de un sujeto que con el alias de "Yiyo", tenía la potestad para distribuir recursos por más de 350 mil millones de pesos entre los municipios cundinamarqueses, a cambio de una comisión que según él repartía con el señor Ardila, un magnate, playboy, cazador, hijo del dueño del prestigiooso periódico El Espacio y solapado corrupto no declarado pero que también caerá.
El propio "Yiyo" habla en una entrevista con un representante a la cámara, conversación que fue grabada, sobre la forma como él y el gobernador "porque no son guevones" se distribuyen los sobornos de los contratos.
El asunto no ha tenido trascendencia, hasta ahora, en los estrados judiciales porque al parecer en la Fiscalía no hay voluntad política para meterle la muela a este horroroso escándalo.
Y para completar, el Contralor Distrital, Oscar González, está enredado con las explicaciones que deberá entregar a la Procuraduría por el origen del dinero con que él y su esposa compraron dos apartamentos en Miami.
Además, tiene que aclarar a la Fiscalía por qué la declaración privada que cada año lo obliga a presentar la Ley Anticorrupción no coincide con la de renta, y responder a la Dian por una posible evasión fiscal por la compra de dos apartamentos en Miami a un precio superior a los 4.000 millones de pesos colombianos.
Según la revista CAMBIO
un fiscal de la Unidad de Delitos contra la Administración Pública acaba de concluir la indagación preliminar y tiene listo un llamamiento a indagatoria. Por su parte, fuentes de la Dian sostienen que, a pesar de las limitaciones de la reserva legal, las averiguaciones emprendidas por las inconsistencias que el Procurador General advirtió en las tres últimas declaraciones de renta de González y de su esposa, "marchan sin pausa" y servirán para decidir, en breve, si hay o no lugar a sanciones.

Es probable que con todas las argucias jurídicas y administrativas a las que está apelando González Arana, no sea detenido antes de terminar su mandato, el 31 de diciembre.
Pero cualquiera que sea su suerte, este sujeto, González Arana, que dice ser un adalidad de la lucha anticorrupción y que ha embargado por más de 70 mil millones de pesos a los propietarios de buses y busetas que se embolsillaron los recursos para la reposición de equipos, tiene unos serios cuestionamientos morales.
No es tolerable que un funcionario público, más en el cargo que hoy en dia ocupa González Arana, desconozca las normas legales y tributarias, que le exigen a él y a su esposa, Beatriz Alicia Noguera Pardey, funcionaria del Congreso, que rindan declaración de sus bienes en Colombia y en exterior y que sean ejemplo de moralidad y eficiencia.
Si estos dos contralores, que deberían ser luz, faro y guia del combate a la corrupción, son corruptos, qué le puede esperar a este país?
En los bolsillos de esta clase de pillos de cuello blanco, está mucha de la repsonsabilidad por la inmoralidad que campea en Colombia y lleva a que un numero grande de colombianos crea que se justifica llegar a un posición pública para robar contrareloj, porque si no, el que viene va a robar más que el que sale.
Cuando Pablo Ardila hizo campaña por la gobernación, su lema era: "porque Cundinamarca merece más".
No completó nunca su idea, si lo que quería decir era que Cundinamarca merece más robos, más asaltos a sus erarios, más sobornos, más chantajes, más corruptos de todas las pelambres como son los que ha traído Ardila a este departamento.
Y si Gonzalez Arana cree que nos va a convencer diciendo que compró dos apartamentos por dos millones de dólares sin sacar un peso del país, que nos enseñe el método a los colombianos, especialmente a los más pobres, que ya que no podemos conseguir vivienda en Colombia tengamos la posibilidad de una bonita casa en las fértiles tierras de La Florida, donde al parecer le venden a uno las viviendas con sólo mostrar la cédula y si llevar un solo dólar.
Al menos que nos diga cómo es que salió del país sin un dolar y que lo que entregó allá como arras para el negocio se lo regaló un gringo.
No será que tiene una cuenta cifrada en Suiza o un tesoro escondido en una isla del Caribe, de donde obtuvo los recursos para comprar sus apartamentos sin sacar un solo peso del país?.
Pero son más corruptos quienes, teniendo la facultad legal para capturar a estos pillos, se quedan callados y los dejan libres.